¿Cuál fue el primer puesto que desempeñó?
—Entré de ordenanza. Me pusieron un uniforme, como si fuera un botones y debía acompañar a los clientes hasta el despacho del director. De allí pasé a Secretaría, donde hacía fotocopias, ordenaba los pedidos y repartía material. Nuestras oficinas se encontraban al final de Chapistería y hacíamos todos los documentos a mano o a máquina.
¿Qué coches se fabricaban entonces ?
—Mini, Morris, Mg, Austin. Entonces sólo existía el turno de mañana y se fabricaban ciento y pico coches al día.
¿Cómo han cambiado las instalaciones?
—Mucho. La parte nueva del puente y pintura no existían. La fábrica ha cambiado a mejor, en la manera de trabajar y en los talleres también.
¿Qué recuerda de aquella época?
—A mi primer jefe en Secretaría, Miguel Ganuza. Y los madrugones. En aquel entonces venía con mi padre en coche —tenía un Morris blanco precioso—, y cuando me olvidaba el carné en casa, me tocaba llamar a un taxi y volver a recogerlo.
¿Se acostumbró a madrugar?
—No, nunca. De hecho mi mujer ha sido la que me ha despertado toda la vida a las 5.15h. Si no me despertaba ella un día, llegaba tarde. Pero puedo decir tranquilo que, en 47 años, me he quedado dormido días contados.
¿Cuál es el incidente más impactante que recuerda?
—En el año 74/75 se quemó la fábrica, hubo un incendio en el almacén de ruedas y estuvo cerrada un año, justo el que yo me fui a la mili. El humo se veía desde la entrada de Landaben.
«Puedo decir tranquilo que, en 47 años, me he quedado dormido días contados.»
¿Se le hace raro no venir a trabajar?
—No, estoy disfrutando mucho de este periodo. Ahora me levanto cuando me canso de dormir, sobre las 8 o las 9h. Y salgo a pasear, al gimnasio, a tomar un café con mi mujer.
¿Qué planes tiene para el futuro próximo?
—Del 1 al 8 de abril de este mismo año me voy a Nueva York. Quiero conocer esa cultura. Aquello tiene que ser maravilloso.
¿Y para uno más lejano?
—Después de tantos años, tengo la esperanza de conocer la casa madre de Wolfsburg. Sé lo que ha habido aquí, ahora quiero ver lo que hay allí.