Volkswagen Navarra ha estrenado recientemente una impresora 3D de última generación única en todo el Grupo Volkswagen. La impresora 3D, de la marca HP y con tecnología Multijet Fusion, permite crear todo tipo de piezas y útiles (herramientas que facilitan la fabricación de los coches). De hecho, prácticamente el 100% de los útiles del Volkswagen T-Cross, cuya producción en serie comenzará a finales del presente año, se van a crear con la nueva impresora 3D.
Dentro del Área Técnica de Producto de Volkswagen Navarra, el departamento de Pilothalle comenzó a trabajar el pasado mes de mayo con la nueva impresora 3D, capaz de crear todo tipo de piezas y útiles a partir de los planos previamente diseñados y dibujados en ordenador y a una velocidad mayor que las impresoras 3D convencionales.
La nueva impresora, que consta de tres dispositivos diferentes (impresora, máquina de carga y posprocesado y máquina de limpieza) emplea la tecnología Multijet Fusion, que sigue el método de impresión multiagente, aplicando por capas el material PA11 -polvo de poliamida, también denominado nailon-, un agente y la tinta, a diferencia de la tecnología FDM, que con el modelado por deposición fundida está diseñada para que cada capa de una pieza sea formada por el paso de un cabezal con material.
Calidad y velocidad en buenas manos
«La diferencia con la anterior impresora 3D que teníamos, con tecnología FDM, es importante, ya que la nueva impresora 3D es 30 veces más rápida. Hablamos de una máquina que nos va a permitir ahorrar en útiles, ganar en calidad y aumentar en capacidad de impresión”, explica Javier Cuartero García, responsable de montaje y taller en Pilothalle, que detalla que son tres los trabajadores de Volkswagen Navarra que manejan la nueva impresora 3D: Iosu Ayarra Ayechu, Iñaki Irigoyen Urra y Gorka Eliceche Elizagoyen.
Las principales ventajas que aporta la nueva impresora 3D son el ahorro económico en las piezas que se crean (ya se están fabricando cuñas de ajuste por unos 10 euros, frente al coste de compra de 70/75 euros por pieza), la mayor calidad de las piezas frente a las que producía la antigua impresora 3D (en cuanto a propiedades mecánicas, dureza, durabilidad…) y la posibilidad de fabricar un mayor número de piezas en un menor espacio de tiempo (por ejemplo, 15 juegos de útiles para ajustar el portón del coche en apenas 24 horas, frente a las 255 horas que costaba obtener ese mismo número con la anterior tecnología).
Por último, el gerente de Pilothalle, Burkhard Zockoll, subraya la importancia que posee “el diseño y el dibujo” de las piezas para el posterior proceso de impresión, “ya que podemos imprimir cualquier pieza que tengamos convenientemente diseñada y dibujada en ordenador”. Además, Zockoll expresa el valor que tienen las sinergias dentro de la marca Volkswagen, “porque cualquier diseño de útiles realizado por nuestro equipo se comparte con las otras fábricas que fabrican el Volkswagen Polo y el Volkswagen T-Cross”.